boda casa la siesta cadiz

Estar por Cádiz en Casa la Siesta siempre es un gustazo y si es para fotografiar una boda, es además una suerte que mi profesión como fotógrafa me regala. No tenía el placer de haber estado antes en este cortijo de inspiración andaluza situado en Vejer de la Frontera. Tal y como anuncian en su web, Casa la Siesta en un hotel boutique de lujo con encanto y tradición gaditana rodeado de naturaleza y tranquilidad. Y cuando llegué allí entendí que es realmente un buen sitio para casarse y pasar el día de tu boda junto a tu gente.

Caballos, molinos de viento y prados verdes fueron los que me acompañaron durante todo mi camino en coche hasta llegar a la finca. Al llegar, estaban ya preparando todo lo que tocaba ese día de boda: flores, sillas, sombrillas para aguantar el sol de primavera andaluz y muchas ganas y nervios porque todo fuese bien. Sin embargo, tengo que reconocer que la tranquilidad de esta pareja era envidiable. Sabían que todo iba a ir bien y querían que todo fuese lo más relajado y natural posible. Es decir, un día tranquilo rodeados de los suyos y disfrutando simplemente de lo que fuera a suceder. Y eso fue justo lo que pasó ese día: mucha alegría y relajación por parte de todos. Ese día era para celebrar cosas y ellos lo sabían.

Ella con vestido increíble de Laure de Sagazan de dos piezas. Con la espalda abierta y un estillo de vestido de novia minimalista donde el lema «lo menos es más» gana por goleada. Su pelo recogido muy sencillo en un tocado de flores y manteniendo su look natural. Él, un enamorado de los comics y del color amarillo, quiso darle su toque personal al look de novio informal: pajarita, tirantes y zapatillas Adidas Stan Smith.

Lo demás, podéis verlo en las fotografías de aquí abajo. Un placer que mi trabajo me brinde la posibilidad de conocer a personas con tantas ganas de celebrar y de disfrutar de días así de importantes en su vida.

Os recomiendo que también echéis un ojo a esta boda que fotografié en las playas desiertas de Cádiz.