Hace unos meses tuve la oportunidad de viajar a Suiza a fotografiar la preboda de Isa y César.
Viven allí desde hace años y no sé si disfruté más con lo que me explicaban de las costumbres y la cultura del país o de los paisajes y construcciones que veía. Suiza es una verdadera belleza, vayas por donde vayas tienes la sensación de estar constantemente en un paisaje de cuento. Construcciones de tejados imposibles y bosques en los rincones de la ciudad que menos te esperas.
Ellos residen en Basilea, por lo que hicimos recorrido turístico por la ciudad para después acercarnos a la montaña.
En mi trabajo como fotógrafa me encanta poder escaparme a la naturaleza, por lo que hacer una sesión preboda en las montañas Suizas era una idea de lo más tentadora.
El tiempo nos fastidió la subida a la montaña que teníamos prevista para la sesión, pero después de caminar un rato, localizamos un lago espectacular que aprovechamos el resto del día.
Colores vivos, brillantes y saturados hasta límites casi imposibles. Todo parece muy vivo allí y da la sensación de que la lluvia está constantemente limpiando esos colores para que luzcan con todo su esplendor. Desde luego Suiza es mágica….